El Kremlin ha rechazado de manera enfática las alegaciones occidentales que sugieren una relación con el trágico accidente del avión del líder de Wagner, Yevgueni Prigozhin, el cual cobró la vida de todos sus ocupantes el pasado miércoles.
Dmitri Peskov, el portavoz de la Presidencia rusa, desestimó estas afirmaciones en su primera conferencia de prensa virtual en casi tres semanas. «Es completamente falso», declaró Peskov.
En Occidente, se ha especulado ampliamente sobre la catástrofe aérea y la trágica muerte de Prigozhin. El Kremlin enfatizó que estas especulaciones se están presentando desde una perspectiva particular.
Peskov subrayó la importancia de basar cualquier discusión en hechos concretos, aunque reconoció que, hasta el momento, la evidencia disponible es limitada debido a la investigación en curso. El presidente ruso, Vladímir Putin, expresó ayer que espera los resultados de esta investigación, la cual se espera que concluya en un futuro cercano.
En cuanto al futuro de la compañía de mercenarios dirigida por Prigozhin, Peskov afirmó no tener información al respecto. Putin rompió su silencio sobre el accidente el día anterior, destacando que los exámenes técnicos y genéticos requerirán tiempo para completarse.
El presidente ruso también describió a Prigozhin como un individuo talentoso y exitoso empresario que cometió graves errores en su vida, pero logró resultados significativos.
Putin había acusado previamente a Prigozhin de traición cuando el líder de Wagner se sublevó y avanzó con sus fuerzas a aproximadamente 200 kilómetros de Moscú. Sin embargo, posteriormente, Prigozhin fue recibido en el Kremlin, y se acordó que trasladaría a sus mercenarios a Bielorrusia.
En noticias relacionadas, el Kremlin confirmó que el presidente Putin no asistirá a la próxima cumbre del G20 en Nueva Delhi, programada para el 9 y 10 de septiembre. El portavoz presidencial sugirió que Putin podría participar en la cumbre de manera virtual debido a la agenda apretada y la atención centrada en la operación militar especial en Ucrania. Esta será la segunda cumbre consecutiva del G20 a la que Putin no asistirá en persona
