El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo un llamado a la comunidad internacional en la Asamblea General de la ONU para continuar apoyando a Ucrania en su conflicto con Rusia. Durante su discurso, Biden destacó la importancia de defender la independencia de Ucrania y cuestionó si permitir su agresión tendría un impacto en la seguridad de otras naciones.
Biden subrayó que la responsabilidad principal de la guerra recae en Rusia y que solo este país tiene el poder de poner fin al conflicto de inmediato. También señaló que Rusia parece creer que el mundo eventualmente se cansará y permitirá sus acciones sin consecuencias, una perspectiva que Biden busca cambiar a través del apoyo internacional.
El presidente estadounidense ha priorizado la movilización de aliados para respaldar a Ucrania como una parte fundamental de su política exterior. Argumenta que enviar una señal clara a Vladimir Putin, presidente ruso, es esencial para mantener la estabilidad en Europa y el mundo.
Sin embargo, Biden enfrenta críticas de algunos miembros del Partido Republicano que cuestionan los gastos en el conflicto ucraniano. Entre ellos se encuentra el expresidente Donald Trump, quien ha prometido poner fin a la guerra rápidamente si regresa al poder.
En su discurso, Biden enfatizó que la invasión rusa a Ucrania violó la Carta fundacional de la ONU, que se basa en el respeto a la soberanía y la integridad territorial de las naciones. Sus palabras resonaron con las del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien describió la invasión como un «nexo de horror» en su discurso de apertura de la Asamblea General.
Además de la cuestión ucraniana, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso dos conferencias de paz, una sobre Ucrania y otra sobre Palestina, con el objetivo de abordar los conflictos y centrarse en la lucha contra el cambio climático. Petro también resaltó la injusticia en sectores como la salud, donde los países más ricos tienen prioridad en el acceso a vacunas, y expresó su preocupación por el incumplimiento de los objetivos de desarrollo humano planteados por la ONU para 2030 debido a esta desigualdad.
La intervención de Biden y las propuestas de Petro reflejan la compleja dinámica de la política internacional y los desafíos globales que enfrenta la comunidad internacional en la actualidad.