En un análisis sobre la política arancelaria del gobierno de Donald Trump, podemos resaltar tanto lo que se ha hecho hasta ahora como las expectativas de nuevas medidas que podrían intensificar la tensión en el comercio internacional.
Trump ha impuesto aranceles a importaciones de diversos países, incluyendo un 25% sobre productos provenientes de Canadá y México, además de nuevos gravámenes a productos chinos. Estas acciones han provocado respuestas de represalia por parte de los países afectados, generando inquietud en los mercados globales.
Expertos advierten que esta escalada podría desembocar en una guerra comercial de mayor envergadura, con efectos negativos en las cadenas de suministro, el incremento de precios para los consumidores y una posible ruptura de relaciones comerciales históricas. En este contexto, el análisis de El Universal se centra en evaluar las repercusiones de los aranceles ya aplicados y anticipar futuras decisiones, en un entorno marcado por la incertidumbre y las tensiones geopolíticas.
A continuación, se muestra una gráfica representativa del impacto económico en México, donde se observa una tendencia a la baja en las exportaciones atribuida, en parte, a la aplicación de estos aranceles:
