A solo horas de las elecciones, los discursos del expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris exponen dos visiones radicalmente distintas para Estados Unidos. Trump ha intensificado su retórica, sugiriendo conspiraciones de fraude por parte de los demócratas, mientras que Harris impulsa un mensaje de optimismo y renovación, destacando el inicio de «una nueva generación de liderazgo».
Con más de 75 millones de votos anticipados ya emitidos, la nación enfrenta una elección histórica que podría redefinir el curso del país y el mundo. Mientras Trump recorre estados clave como Carolina del Norte, Pensilvania y Michigan, Harris se centra en movilizar votantes en bastiones demócratas como Filadelfia, acompañada de figuras públicas como Lady Gaga y Oprah Winfrey.
Trump y Harris: Discursos opuestos en un país dividido
Trump, en sus recientes eventos en Pensilvania, ha lanzado fuertes críticas, declarando sin pruebas que el sistema electoral es manipulable y que los demócratas buscan “robar esta maldita cosa.” Este tipo de comentarios han generado preocupación por la posibilidad de que intente desconocer los resultados en caso de perder, tal como ocurrió en 2020.
Por su parte, Harris ha apelado a la unidad, condenando «el odio y el caos» y buscando revitalizar el espíritu democrático. En Detroit, afirmó: “Nacimos para un momento como este”, y alentó a los votantes a ver en ellos mismos la promesa de Estados Unidos, instando a todos a optar por la esperanza en lugar del miedo.
El impacto de un eventual triunfo de Trump o Harris
Si Trump triunfa, se convertiría en el segundo expresidente en la historia en recuperar el poder tras una derrota, completando un retorno político tras su salida en 2021 y su condena penal reciente. Por otro lado, un triunfo de Harris representaría un momento histórico, al ser la primera mujer presidenta en los casi 250 años de historia estadounidense, tras unificar al Partido Demócrata luego de que el presidente Joe Biden desistiera de postularse.
Las encuestas reflejan un empate en varios estados clave como Pensilvania, Michigan, y Georgia. Sin embargo, una fuerte participación anticipada de votantes femeninas, impulsada por temas de derechos reproductivos, podría beneficiar a Harris, quien también ha trabajado para atraer el voto de hombres negros y latinos.
Un desenlace incierto
Con ambos candidatos recorriendo los estados clave hasta el último minuto, la incertidumbre sobre el resultado final sigue latente, en una carrera que pondrá a prueba la democracia en Estados Unidos y que tiene a ambos partidos y millones de ciudadanos en vilo.
