Contra los pronósticos de una posible desaceleración, la economía mexicana dio una señal positiva al crecer 1.0 por ciento en febrero, según datos del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), publicado por el INEGI. Se trata del mayor avance mensual desde abril de 2023.
Este crecimiento superó el pronóstico de analistas que estimaban un avance del 0.6%, aunque quedó por debajo del 1.14% que el mismo INEGI proyectó en su estimación oportuna. El principal motor del repunte fue el sector industrial, que creció 2.49% mensual, su mejor desempeño desde septiembre de 2020.
Dentro del sector industrial, las manufacturas destacaron con un crecimiento de 2.94%, seguidas por la construcción con un alza de 2.82%, y la minería, que repuntó 0.82%, la cifra más alta desde diciembre de 2023.
Por su parte, el sector servicios mostró una expansión de 0.61%, impulsado especialmente por actividades culturales y deportivas, que crecieron 5.39%. En tanto, las actividades primarias (agricultura, ganadería, pesca) también avanzaron un 1.0%, encadenando tres meses consecutivos con resultados positivos.
A tasa anual, el IGAE aumentó 0.5%:
- Actividades industriales: +0.4%
- Servicios: +1.0%
- Actividades primarias: -4.3%
Riesgos a futuro
Pese al resultado positivo, analistas como Alberto Ramos, economista en jefe para América Latina en Goldman Sachs, advierten que la economía aún enfrenta retos. Entre ellos, la incertidumbre política postelectoral, la posible reducción del gasto público, y las tensiones comerciales con Estados Unidos, particularmente ante un escenario de nuevos aranceles.
También se prevé una moderación en la inversión pública y privada, afectada por la necesidad de consolidación fiscal y la incertidumbre interna, en especial respecto a la revisión del T-MEC.
