A pesar de los intentos internacionales por mediar en el conflicto, la guerra entre Ucrania y Rusia continúa sin avances significativos. El presidente ruso, Vladímir Putin, ha rechazado un alto el fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos y Ucrania, utilizando el simbolismo del Día de la Victoria para consolidar su posición.
El presidente estadounidense, Donald Trump, inicialmente mostró una postura cercana al Kremlin, pero tras reuniones con Volodímir Zelenski, ha amenazado con nuevas sanciones a Rusia. La firma de un acuerdo bilateral entre Kiev y Washington sobre la explotación del subsuelo ucraniano refuerza la cooperación, aunque genera dudas sobre su eficacia como garantía de seguridad.
La destitución del consejero de Seguridad Nacional, Mike Waltz, y su reemplazo temporal por Marco Rubio, añade incertidumbre a la política exterior estadounidense. Mientras tanto, la guerra continúa afectando a civiles ucranianos, como lo evidencia un reciente bombardeo en Kiev que dejó 12 muertos