Campesinos del municipio de Lerdo, pertenecientes al módulo de riego 03 San Jacinto-Jerusalén, enfrentan serias afectaciones en sus cultivos tras no recibir el volumen de agua asignado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) como parte del programa Agua Saludable para La Laguna.
Daños en los cultivos
Samuel Martínez, presidente del módulo de riego y dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en Lerdo, informó que alrededor de 800 hectáreas de alfalfa han sido dañadas debido a la falta de riego. Esto se debe a la suspensión de operaciones de la planta potabilizadora, que actualmente no cuenta con personal operativo tras la conclusión del contrato de la empresa encargada.
La asignación de 2,200 litros de agua correspondiente al estiaje no ha sido entregada, agravando la situación para los agricultores, quienes dependen del suministro para mantener sus cultivos.
Promesas incumplidas
Martínez señaló que el gobierno federal no ha cumplido con los compromisos establecidos, incluyendo apoyos en semillas, fertilizantes, maquinaria, diesel y tecnificación de canales. Los productores han tenido que realizar inversiones propias para el mantenimiento de los canales de riego, mientras las promesas gubernamentales permanecen incumplidas.
«El gobierno federal nos tiene abandonados, ya son más de seis años sin apoyos y con puras evasivas», expresó el dirigente.
Riesgo de acciones por parte de los productores
La falta de respuesta de la Conagua, encabezada por Gabriel Riestra en la región, ha generado frustración entre los campesinos. Samuel Martínez advirtió que, de no recibir una solución a inicios de 2025, podrían retomar medidas como el bloqueo de obras del proyecto Agua Saludable, como ocurrió semanas atrás.
Si bien los productores reconocen que el proyecto es beneficioso para la comunidad, señalan que sus necesidades han sido ignoradas, dejando a los campesinos en una posición vulnerable.
Solicitan soluciones inmediatas
Martínez destacó que, de haberse cumplido los compromisos del gobierno federal, las pérdidas habrían sido menores y los productores habrían podido sembrar más hectáreas. Por ello, hizo un llamado a las autoridades para atender las demandas del sector agrícola y evitar mayores afectaciones en la región.
Con el inicio de un nuevo año, los agricultores esperan que las promesas se conviertan en acciones concretas que permitan garantizar la viabilidad de sus actividades productivas.