Nueva York, EE.UU. – 1 de julio de 2025.
La Fiscalía del Distrito Este de Nueva York ha retirado formalmente los cargos por narcotráfico en contra de Ovidio Guzmán López, hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán. La decisión fue presentada este lunes durante una audiencia en una corte federal en la que participaron los representantes legales del acusado y la jueza Sharon Johnson Coleman.
Aunque las autoridades estadounidenses no han ofrecido detalles específicos sobre el motivo del desistimiento, fuentes cercanas al caso especulan que podría tratarse de una reorientación de la estrategia judicial del gobierno federal, o incluso un posible acuerdo de cooperación con Guzmán López, conocido como “El Ratón”, quien fue extraditado a Estados Unidos en septiembre de 2023.
Cabe recordar que Ovidio Guzmán enfrentaba múltiples acusaciones federales por tráfico de fentanilo, lavado de dinero y conspiración criminal, atribuidas a su presunta participación como uno de los cabecillas de “Los Chapitos”, facción del Cártel de Sinaloa liderada por los hijos de El Chapo.
La medida ha generado reacciones encontradas entre analistas y expertos en seguridad. Mientras algunos consideran que se trata de una táctica legal para concentrar esfuerzos en otros casos prioritarios o fortalecer procesos en curso en otras jurisdicciones —como el que aún enfrenta en Chicago—, otros ven en la decisión una señal preocupante sobre la capacidad real del sistema judicial estadounidense para llevar a cabo juicios de alto perfil contra figuras del narcotráfico.
Ovidio Guzmán permanece bajo custodia en una prisión de alta seguridad en Illinois y continuará enfrentando cargos pendientes en otras cortes federales.
Este giro en el caso reaviva el debate sobre la efectividad del combate internacional al narcotráfico, así como el papel de la cooperación bilateral entre México y Estados Unidos en materia de justicia.
