El gremio del humor y el circo en la región lagunera participó, una vez más, en las tradicionales peregrinaciones a la Virgen de Guadalupe en Torreón, coincidiendo con la celebración del Día Internacional del Payaso, que se festeja cada 10 de diciembre. Más de 50 payasos y artistas circenses formaron parte de la marcha, destacando por sus coloridos trajes, grandes zapatos, pelucas y las clásicas narices rojas que los identifican.
A lo largo del recorrido, los artistas sacaron sonrisas a los asistentes con sus ocurrencias y bromas, mientras entonaban canciones guadalupanas y ofrecían rezos. También aprovecharon para tomarse fotografías con sus colegas y con las familias que los acompañaban.
El desfile comenzó en la Alameda Zaragoza y recorrió la avenida Juárez hasta llegar a la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe. Entre danzas y música, los payasos hicieron su aparición, siendo los artistas de Unicirclo Laguna los que, con malabares, zancos y monociclos, llamaron la atención de los presentes, especialmente de los niños, a quienes también les dieron dulces.
El payaso Cachirris, uno de los participantes, explicó que la peregrinación es una forma de agradecer a la Virgen de Guadalupe por la vida, salud y trabajo que reciben. Además, destacó que este evento ha ido ganando seguidores con el paso de los años, incorporando tanto a nuevos payasos como a más niños.
Cachirris, quien lleva nueve años ejerciendo como payaso de fiestas y animador, señaló que ser payaso hoy implica un compromiso tanto con la sociedad como con uno mismo. “Para ser buen payaso hay que ser buena persona. No se trata solo de ponerse la nariz roja, es necesario prepararse porque tenemos un compromiso con la niñez”, añadió, subrayando la importancia de ofrecer humor sano en tiempos difíciles.
