Una semana tras el inicio del segundo mandato de Trump, el Pentágono ordenó a tres aerolíneas de carga suspender once vuelos con artillería y munición rumbo a Ucrania desde Dover AFB y Qatar.
La medida sorprendió a la Casa Blanca, que no fue consultada, y afectó envíos críticos de apoyo militar que ya habían partido hacia bases ucranianas.
Analistas advierten que esta instrucción podría demorar refuerzos en el frente y generar tensiones internas sobre la continuidad de la ayuda estadounidense a Kiev.