Los propietarios de la quinta en la que ocurrió una riña que resultó en la muerte de un joven de 14 años deberán pagar una multa superior a los 100 mil pesos para poder reabrir el lugar. La Dirección de Inspección y Verificación del municipio, encabezada por Pablo Fernández Llamas, informó que las sanciones están relacionadas con el consumo de alcohol por menores y la riña ocurrida en el establecimiento.
En lo que va del año, el municipio ha llevado a cabo 17 clausuras de este tipo de establecimientos, destacando que, en este caso, las multas específicas incluyen 75 mil pesos por permitir el consumo de alcohol por menores de edad y 42 mil pesos por la riña, lo que suma un total de 117 mil pesos.
El trágico suceso ocurrió en la madrugada del domingo, cuando Bairon Alberto, el menor fallecido, se encontraba en una fiesta en el ejido Ampliación Allende. En medio de una riña, varios individuos ingresaron al lugar y atacaron al joven, quien sufrió heridas de arma blanca en la espalda y el hombro. Al llegar los paramédicos, ya se confirmó su muerte.
Fernández Llamas explicó que, debido a este incidente, se implementarán operativos de inspección en conjunto con Seguridad Pública, Protección Civil y Prevención del Delito, con el objetivo de verificar que los establecimientos cumplan con los reglamentos de seguridad y evitar la presencia de menores en situaciones de riesgo.
El funcionario destacó que las clausuras de estas quintas seguirán siendo una prioridad para las autoridades municipales, y que las sanciones a los propietarios incluyen tanto las multas económicas como la obligación de regularizarse en términos de licencias de funcionamiento y medidas de seguridad.
Se espera que, una vez pagadas las multas y regularizados los trámites pertinentes, los propietarios puedan volver a operar el establecimiento, siempre y cuando cumplan con las normas correspondientes.