La encuesta interna de Morena para seleccionar a su candidato presidencial en las elecciones de 2024 ha desatado una polémica en el partido. Claudia Sheinbaum, con el 39% de las preferencias, se proclamó como la candidata triunfadora, pero su victoria se vio opacada por las alegaciones de irregularidades hechas por el excanciller Marcelo Ebrard, quien obtuvo el segundo lugar con un 26% de las preferencias.
Ebrard denunció públicamente irregularidades graves en el proceso de la encuesta, argumentando que estas ponían en duda la validez de los resultados. A pesar de su llamado a repetir la encuesta, la dirigencia de Morena anunció a Sheinbaum como la ganadora y procedió con el acto de proclamación.
La ausencia de Ebrard en el evento donde se anunció a Sheinbaum como la candidata resalta las divisiones internas en el partido. Aunque la dirigencia de Morena ha defendido la integridad del proceso, la controversia persiste y amenaza con socavar la unidad del partido.
Además de Ebrard, otros candidatos, como Adán Augusto López y Gerardo Fernández Noroña, expresaron su apoyo a Sheinbaum y prometieron trabajar en conjunto para lograr el triunfo en las elecciones de 2024. Sin embargo, la posible salida de Ebrard del partido y su enojo podrían tener un impacto significativo en el futuro político de Morena.
La proclamación de Sheinbaum como la candidata presidencial de Morena marca un hito histórico, ya que podría convertirse en la primera presidenta de México en caso de ganar las elecciones. Sin embargo, la controversia en torno a los resultados de la encuesta amenaza con opacar este logro y plantear desafíos adicionales para el partido en su camino hacia las elecciones de 2024
