La Comisión de Justicia de la Cámara de Senadores se prepara para votar y aprobar la renuncia presentada por Arturo Zaldívar al cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). El dictamen respectivo será discutido en la reunión de la comisión dirigida por la ministra en retiro Olga Sánchez Cordero.
Dentro de las consideraciones del dictamen se establece que, de acuerdo con la Constitución, el presidente de la República tiene la facultad de aprobar o rechazar la renuncia, y dado que el mandatario ya ha dado su consentimiento, se requiere también el aval del Senado.
El documento indica que la Carta Magna solo permite la renuncia al cargo por causas graves, aunque no especifica cuáles son estas causas. Por esta razón, se justifica la aceptación de la renuncia argumentando que «el renunciante conoce las causas graves por las que toma esa decisión».
Se compara el caso de Zaldívar con el de Eduardo Medina Mora, señalando que ambos ministros decidieron dejar su cargo, subrayando que nadie puede ser obligado a desempeñar un trabajo que no desea. Se hace hincapié en el derecho humano al libre desarrollo de la personalidad, independientemente del cargo público que se esté ejerciendo.
El artículo 98 de la Constitución establece que los ministros solo pueden renunciar por causas graves, pero al no detallar qué situaciones entran en esa clasificación, la aprobación o rechazo queda a criterio de los legisladores.
La votación en la Comisión de Justicia se convierte en un paso clave en el proceso de aceptación de la renuncia de Zaldívar, mostrando un análisis cuidadoso de la situación y una interpretación del marco legal en relación con las renuncias en la Suprema Corte de Justicia de la Nación.