A tan solo dos meses de las elecciones presidenciales, Jorge Álvarez Máynez se encuentra en el centro de la controversia tras ser señalado por presunto acoso sexual por parte de la abogada Ana Castelán Valenzuela. Castelán Valenzuela, quien es actualmente candidata para ser regidora propietaria de Cajeme en la alianza PRI, PAN y PRD, hizo públicas estas acusaciones en redes sociales.
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Según su testimonio, durante una reunión privada de Movimiento Sonora en 2019, tras la toma de protesta de Manuel Scott como coordinador de la Comisión Operativa Municipal en Cajeme, Álvarez Máynez, en estado de ebriedad, habría realizado tocamientos inapropiados y comentarios de índole sexual hacia ella, solicitándole incluso que lo abrazara.
Según su testimonio, durante una reunión privada de Movimiento Sonora en 2019, tras la toma de protesta de Manuel Scott como coordinador de la Comisión Operativa Municipal en Cajeme, Álvarez Máynez, en estado de ebriedad, habría realizado tocamientos inapropiados y comentarios de índole sexual hacia ella, solicitándole incluso que lo abrazara.
Ante estos señalamientos, el equipo de comunicación de Jorge Álvarez Máynez respondió a través de un comunicado, calificando las acusaciones como parte de una «guerra sucia» en su contra. Argumentaron que no existen pruebas ni denuncias formales que respalden estas afirmaciones.
No obstante, Castelán Valenzuela aseguró que esta no es una denuncia reciente, ya que en 2021 también había sacado a la luz estas acusaciones, aunque su demanda no procedió ante el partido. Explicó que decidió hacer públicas las acusaciones ahora para evitar ser revictimizada y para resaltar que estas acusaciones no son una estrategia política reciente, sino que tienen años de antigüedad.
Cuando se le preguntó por qué no presentó una denuncia inmediatamente después del incidente, Castelán Valenzuela expresó que, en ese momento, se sintió confundida y no sabía cómo reaccionar debido a su juventud y a la falta de agresividad directa en los comportamientos del candidato.
Estas acusaciones se suman a un contexto electoral ya de por sí tenso, en el que diversos candidatos se encuentran bajo escrutinio público y críticas constantes. La veracidad de las acusaciones y su impacto en la campaña política de Álvarez Máynez aún están por determinarse, mientras tanto, el debate sobre el acoso sexual en la esfera política continúa siendo un tema relevante y delicado.