Hace apenas unas horas, el grupo de hackers Ransomed.vc hizo una impactante declaración: habían logrado acceder a «todos los sistemas» de Sony y afirmaron haber robado datos en caché de la compañía japonesa. Esta noticia ha generado una gran preocupación en la industria de la tecnología y la ciberseguridad, ya que representa una posible violación masiva de la seguridad informática de Sony y una vulnerabilidad de sus datos confidenciales.
Según los informes, los ciberdelincuentes de Ransomed.vc amenazan con vender la información que supuestamente han comprometido, alegando que «debido a que Sony no quiere pagar, no los rescatarán». Esta amenaza plantea un escenario alarmante para Sony, ya que los datos robados podrían ser de gran valor y revelar información sensible sobre la empresa.
La noticia se dio a conocer a través del sitio web Cyber Security Connect, que afirma que este grupo de hackers ha acumulado una lista impresionante de víctimas en su historial de ciberdelitos. Sony ha tomado esta situación en serio y ha iniciado una investigación para evaluar el alcance y las implicaciones de este presunto hackeo.
En un comunicado oficial, Sony declaró: «Actualmente estamos investigando la situación y no tenemos más comentarios en este momento». Esta respuesta refleja la seriedad con la que Sony aborda la situación y su compromiso de abordar cualquier brecha de seguridad que haya ocurrido.
La información que se ha mencionado incluye «presentaciones internas» de PowerPoint, varios archivos Java y una amplia variedad de datos que abarcan aproximadamente unos 6,000 documentos. El grupo de hackers ha anunciado una «fecha de publicación» para el próximo 28 de septiembre, en la que supuestamente revelarán esta información robada si nadie la adquiere. Su objetivo parece ser que alguien obtenga acceso a estos archivos internos de Sony.
Es importante recordar que Sony ya ha enfrentado desafíos relacionados con la seguridad informática en el pasado. En 2011, el PlayStation Network de Sony sufrió un ataque informático que comprometió datos personales de usuarios, incluyendo nombres, apellidos, direcciones, correos electrónicos y teléfonos, lo que también podría haber involucrado información de tarjetas de crédito. Esta situación actual pone de manifiesto la constante amenaza que enfrentan las empresas en el mundo digital y la importancia de mantener una sólida seguridad cibernética en todo momento.
