¿Reír o llorar ante este espectáculo Político?
En un inusual movimiento político, la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz, conocida por su aspiración a la candidatura presidencial del Frente Cívico Nacional, ha tomado un enfoque luchador para enfrentar los problemas de México. Con una máscara de lucha libre y un video en Twitter, Gálvez se sube al ring virtual para librar una «supuesta» batalla simbólica contra la ‘Inseguridad Infernal’, la ‘Violencia Demoledora’, la ‘Fuerza Machista’ y el «Demonio Corrupto» lo cual pareciera una locura política para ganarse la risa de los asistentes.
Esta estratégica jugada, con un tono tan teatral como controversial, busca presentar a Gálvez como una combatiente incansable que desafía a los aspectos más sombríos de la realidad mexicana o dejarla como una simple candidata más en el poder. Sin embargo, esta inusual táctica no ha estado exenta de críticas y cuestionamientos.
La acción de Gálvez toma lugar en un contexto de tensiones políticas y decisiones regulatorias. Hace referencia a la resolución del Instituto Nacional Electoral (INE) que señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador incurrió en «violencia política de género» contra la senadora. A raíz de esto, el INE detuvo temporalmente la difusión de las mañaneras de ciertos días de julio.
En respuesta, López Obrador, en su estilo característico, cuestionó la interpretación de la violencia política de género y defendió la política como un arte y un oficio, insinuando que este tipo de acciones son parte del «juego político» algo que puede ser hasta cuestionado.
La escenificación de Gálvez en el ring virtual ha desatado reacciones mixtas en la opinión pública, con algunos elogiando su audacia y creatividad, mientras que otros cuestionan si estas tácticas realmente abordan los problemas de fondo que enfrenta el país. La controversia y el enfoque poco convencional añaden un nuevo capítulo a la siempre candente arena política mexicana que se ha encargado de hacer su «payasada» en este mitin político.