China y Estados Unidos han alcanzado un acuerdo que establece una tregua de 90 días en su guerra comercial. En una reunión de alto nivel celebrada en Ginebra, ambas potencias acordaron reducir significativamente los aranceles impuestos mutuamente. EE.UU. disminuirá sus aranceles a bienes chinos del 145% al 30%, y China reducirá los suyos sobre productos estadounidenses del 125% al 10%.
El presidente Trump calificó el acuerdo como positivo y destacó la apertura del mercado chino. Ambos países afirman que las conversaciones fueron “sinceras, profundas y constructivas”, y se comprometen a establecer un mecanismo de seguimiento para continuar el diálogo económico y comercial. La tregua ofrece un respiro tras una escalada arancelaria sin precedentes desde 2018, que afectó gravemente al comercio y a las economías globales.
