La Fiscalía General de la República (FGR) anunció este martes que un juez dictó auto de formal prisión contra Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, por su presunta responsabilidad en delitos de delincuencia organizada, específicamente en su hipótesis de delitos contra la salud.
Según las investigaciones, Cárdenas Guillén, conocido como El Mata Amigos y cofundador del grupo criminal Los Zetas, jugó un papel clave en la conformación de alianzas con otros grupos delictivos y en el tráfico de drogas en estados como Michoacán y Guerrero, utilizando el Puerto de Lázaro Cárdenas como uno de sus principales puntos de operación.
Decisión judicial y detención
El auto de formal prisión fue dictado por el Juzgado Cuarto de Distrito en Materia Penal, con sede en Toluca, Estado de México. Por lo tanto, Cárdenas Guillén continuará su proceso en el Centro Federal de Reinserción Social (Cefereso) número 1, ubicado en Almoloya de Juárez, conocido como el Penal del Altiplano.
Esta resolución se suma a la determinación tomada un día antes, cuando se confirmó su formal prisión por el delito de homicidio calificado, en relación con la muerte de seis personas, familiares de un testigo protegido, en hechos ocurridos hace más de una década.
Acusaciones y órdenes de aprehensión
Tras su deportación desde Estados Unidos el pasado 16 de diciembre, la FGR cumplimentó una orden de aprehensión por delitos contra la salud en su llegada a Tijuana, Baja California. Posteriormente, se ejecutó una segunda orden el 18 de diciembre por homicidio calificado.
Aún queda pendiente una tercera orden de aprehensión relacionada con delincuencia organizada, mientras que las autoridades han señalado que se reabrirán al menos siete procesos penales adicionales en su contra.
Entre los delitos que enfrenta el exlíder criminal destacan:
- Delitos contra la salud (narcotráfico).
- Operaciones con recursos de procedencia ilícita.
- Cohecho.
- Acopio, portación y posesión de armas de fuego y cartuchos de uso exclusivo del Ejército.
Implicaciones del caso
La captura y los procesos judiciales contra Osiel Cárdenas Guillén representan un paso significativo en la lucha contra los remanentes de poder del Cártel del Golfo, una organización que durante años mantuvo un control férreo en la frontera noreste de México y que desempeñó un papel clave en el narcotráfico hacia Estados Unidos.
El caso también evidencia los esfuerzos de la FGR por dar seguimiento a crímenes cometidos por líderes del crimen organizado, incluso años después de su captura o extradición. Cárdenas Guillén, quien cumplió una condena en Estados Unidos por narcotráfico y lavado de dinero, ahora enfrenta la justicia mexicana por una larga lista de delitos pendientes.